Foto y texto: Daniel Patlán (@folkmetender)

El pretencioso y pésimamente bautizado Spring Quesadilla Tour 2011 se llevó a cabo el viernes en el Infield del Hipódromo de las Américas. Desgraciadamente, el festival se vio envuelto en una serie de eventos desafortunados causados por fallas en la organización, mismos que se vieron reflejados en la floja entrada al festival.

Los primeros en pisar el escenario fueron Local Natives, quienes fueron altamente comparados con Fleet Foxes, principalmente por los juegos de melodías vocales que utilizan. Los angelinos se veían emocionados y conmovidos por la gente que coreaba sus canciones. Incluso, el bajista compró una sudadera del equipo de futbol de la UNAM, los Pumas, misma con la que se presentó en el festival.

El segundo acto corrió a cargo de OK Go, sin coreografías pero con mucha actitud -y mucho confetti- se ganaron el aplauso de los asistentes. Damian Kulash, el vocalista bajó del escenario con su micrófono y guitarra acústica para interpretar una canción en medio del público, muy a la Arcade Fire en su gira de Neon Bible cuando interpretaban “Wake Up” de manera acústica entre la gente que iba al show.

Al igual que en sus videos, OK Go derrocha energía en su show. Durante una hora no dejaron de brincar, cantar y gritar. Incluso, se dieron el lujo de tener un mini encore en el cual hicieron gala de sus técnicas para tocar campanas.

El acto más importante o por lo menos con más expectativas fue el de Yeasayer. Algunos decían que los nativos de Brooklyn tienen un show aburrido, otros esperaban un show espectatular como lo fue su más reciente álbum Odd Blood (Secretly Canadian, 2010). Lo cierto es que Yeasayer dominó el escenario y se llevó los aplausos de la mayoría del público. Muy parecidos a Animal Collective, los neoyorkinos abusan de las atmósferas electrónicas y los coros vocales. Sin embargo, es ese abuso el que hace que su show y su música sean tan interesantes de ver en vivo. Yeasayer se salió con la suya y dejó un buen sabor de boca con su show.

Para terminar la noche, el neo-hippie Alex Ebert disfrazado de Edward Sharpe se presentó con sus Magnetic Zeros para fomentar la unión y la comunidad. Edward Sharpe & the Magnetic Zeros es una banda que se parece a The Polyphonic Spree después de consumir drogas duras. El personaje de Edward Sharpe es una especie de Jesucristo homeless que canta, brinca, se sienta, baila y grita, todo en menos de 5 minutos. La presencia escénica de este personaje es impactante. Además de ser los más accesibles con la prensa, los muchachos de Los Angeles tuvieron una conexión real con la gente que asistió al Spring Quesadilla Tour 2011, si Ebert en verdad fuera un evangelizador en busca nuevos adeptos, seguro hubiera conseguido una gran cantidad de ellos esa noche. Una gran manera de cerrar un caótico festival del cual se esperaba mucho más.