Como muchos de ustedes lo saben, cualquier cosa puede pasar en un concierto, cosas que pueden provocar el enojo de los artistas y hacer que pare la música. Está Dave Grohl deteniendo un concierto de Foo Fighters al percatarse de una pelea entre el público, hasta James Hetfield casi poniendo fin a un concierto de Metallica después de que el público arrojó objetos al escenario.

En un reciente concierto de la banda argentina Dividos, Ricardo Mollo (líder de la banda) se vio obligado a parar la música solicitando la presencia del padre de una hija que se encontraba dentro de un auto en el estacionamiento del mismo concierto, encerrada.

Por supuesto, el padre (con diferentes prioridades, tal como lo apuntó Mollo), había dejado a su hija “a salvo” en el vehículo mientras concluía el concierto.

Arriba pueden ver un video con lo ocurrido, en el cual también se puede apreciar a Mollo pidiendo a un fan que baje de una de las columnas, ya que es una hazaña de alto riesgo.

¿Qué opinan ustedes? ¿Se trata del peor padre del mundo?