David Gilmour, el legendario guitarrista de Pink Floyd, ha dejado claro una vez más que la icónica banda no se reunirá en el futuro (vía Rock Celebrities). En una reciente entrevista, Gilmour mencionó que no tiene interés en revivir el pasado y que se siente completamente en paz con su decisión. Esta declaración pone fin a cualquier esperanza de ver a Pink Floyd en el escenario nuevamente.

Gilmour explicó que, aunque valora profundamente su tiempo con la banda, prefiere enfocarse en sus proyectos personales y en su vida familiar. A sus 78 años, el músico británico está más interesado en explorar nuevas direcciones musicales y disfrutar de su retiro. “No tengo ningún deseo de volver a tocar con Roger Waters”, afirmó Gilmour, refiriéndose al exbajista y cofundador de la banda.

La relación entre Gilmour y Waters ha sido notoriamente tensa desde la salida de Waters de Pink Floyd en 1985. A pesar de algunos intentos de reconciliación, las diferencias creativas y personales han mantenido a los dos músicos en caminos separados. Gilmour ha dejado claro que no hay rencores, pero también que no hay interés en revivir viejas disputas.

En lugar de mirar hacia atrás, Gilmour está enfocado en el presente y en el futuro. Recientemente lanzó un nuevo álbum en solitario, “Luck and Strange”, que ha sido bien recibido por la crítica. Este trabajo refleja su evolución como artista y su deseo de seguir creando música que le apasiona.

Para aquellos que crecieron con la música de Pink Floyd, las palabras de Gilmour pueden ser un recordatorio de que todo tiene su tiempo y lugar. La banda dejó un legado imborrable en la historia del rock, y Gilmour está decidido a seguir adelante, honrando ese legado a su manera.