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¿Eres de los que no puede evitar echarse un “cigarrito”, cuando está echando “la cubita”? Pues esperamos que no se te ocurra dejar de tomar en algún momento, porque te va a costar mucho trabajo. Una investigación realizada por el Instituto de Investigación en Adicciones de la Universidad en Buffalo descubrió que las personas que fuman tienen menores probabilidades de seguir un tratamiento para curar la adicción al alcohol. Kimberly Walitzer, científica investigadora del instituto, notó que:

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“Los fumadores de tabaco duran menos en sus tratamientos contra el alcohol y tienen menos posibilidades de lograr metas relacionadas con esto (disminuir el consumo de alcohol) a diferencia de sus contrapartes no fumadores”.

En Estados Unidos, aunque sólo el 20 por ciento de la población es fumadora, la relación entre el abuso de ambas sustancias es muy cercana, lo que quiere decir que aunque no todos los fumadores son alcohólicos, un alto porcentaje de alcohólicos son fumadores. 61% de los hombres y 67% de las mujeres para ser más exactos.

Se cree que la dificultad de dejar de tomar cuando eres fumador que es por la relación que existe entre estos vicios. La recomendación de Walitzer, es dejar de fumar y beber al mismo tiempo, lo que implicaría un tremendo compromiso, pues muchos alcohólicos en recuperación, usan el tabaco para mitigar la ansiedad de un trago.

Vía: Sciencedaily.com