De acuerdo con un estudio realizado por la Oregon Health and Science University, el consumo de alcohol en cantidades moderadas pude ayudar al sistema inmunológico.

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Los científicos llegaron a este descubrimiento a través de un experimento realizado en simios. La prueba consistía en lo siguiente: un grupo de sujetos consumieron bebidas con un bajo porcentaje de alcohol, mientras que el otro consumió grandes cantidades de etanol. Ah, claro, y también se creó un grupo de control que solo bebía agua azucarada. Además a todos los sujetos se les dio una dosis de vacuna para la viruela.

Después de un periodo de tiempo, a todos los grupos se les dio otra dosis de la misma vacuna, y se analizó cómo sus sistemas inmunes reaccionaban. Fue ahí cuando se descubrió que le grupo que había consumido alcohol modernamente mostraba mejoría en sus defensas, mientras que el grupo que bebió mucho alcohol, mostró un deterioro inmunológico.

Si bien los científicos no saben exactamente a qué se debe esto, les queda claro que el alcohol en pequeñas dosis ayuda a defendernos de enfermedades.

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Vía: mic.com