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En verano de 2013, el mundo estaba obsesionado con la canción “Blurred Lines” de Robin Thicke, Pharrell Williams y T.I. Sin embargo, el éxito de la canción no fue tan bien recibido por todo el mundo: la familia del famoso cantante Marvin Gaye aseguró que Thicke había plagiado la canción, ya que sonaba muy similar a “Got To Give It Up”, el hit de 1977. Fue así que decidieron meter una demanda en contra de los intérpretes y hoy, un año después, el juez ha dictaminado que tanto Robin Thicke como Pharrell son culpables y deberán pagar $7.3 millones de dólares a la familia de Gaye.

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Al momento de la demanda, Thicke fingió demencia y contra-demandó, argumentando que si bien el ritmo de la canción es similar, esto se debía únicamente a que era el mismo género. Sin embargo, meses antes había dicho que “Got To Give It Up” era una de sus canciones favoritas y más tarde admitió haber estado bajo los efectos de la droga Vicodin cuando escribió el famoso hit. Acá abajo les dejamos ambos videos para que los comparen. ¿Ustedes qué opinan?

Via ThisSongIsSick.