Por: @folkmetender

My Bloody Valentine es una de las bandas responsables por gran parte del sonido de nuestros tiempos, pocas agrupaciones han influenciado de tal manera a los diferentes géneros, desde el dream pop y su forma de cantar cuasi susurrada, hasta el rock, donde las guitarras son pieza fundamental de su formación. Kevin Shields, guitarrista y vocalista de MBV tiene su lugar asegurado en el Olimpo de los guitarristas y los músicos más influyentes de nuestros tiempos. Ahora todo el mundo entiende (por lo menos un poco mejor) por qué tuvo que usar 19 estudios para grabar Loveless, su genialidad fue sumamente incomprendida en su época. Precisamente por su influencia, es muy complicado limitarnos a hablar sólo de diez, pero a continuación listamos algunas bandas que deberían vivir agradecidas con Shields por crear obras como Loveless, “Sometimes” o “You Made me Realise”, ya que de forma directa o indirecta, el sonido de ese legendario álbum hizo que estas bandas se inclinaran a tocar de la manera en que lo hacen.

A Place to Bury Strangers.

A Place to Bury Strangers.

1. A Place to Bury Strangers

Una de las bandas que más obsesionadas están con el ruido. Es tal su pasión por la distorsión, que Oliver Ackerman (guitarrista y vocalista) creó su propia marca de pedales de guitarra y bajo, con el nombre de Death by Audio, mismos que él construye. Entre sus clientes se encuentran Trent Reznor, Josh Homme y Grooms. A lo largo de tres discos, A Place to Bury Strangers han hecho del fuzz, el feedback y las guitarras sumamente ruidosas, su sello personal.

Amusement Parks on Fire.

Amusement Parks on Fire.

2. Amusement Parks on Fire

Michael Feerick es un chico inglés que tomó lo mejor de la guitarra de Kevin Shields y le agregó un poco de punk rock para crear su proyecto Amusement Parks on Fire. La influencia directa de las plastas sonoras de Shields es evidente, se pueden escuchar por lo menos tres guitarras diferentes en casa una de sus canciones, siendo éste, el elemento más importante en el sonido de APOF. Música que refleja la angustia adolescente de una generación; una de las bandas más infravaloradas de nuestros tiempos.

Austolux.

Autolux.

3. Autolux

Un trío de Los Ángeles que pudimos ver en la Ciudad de México hace unos años, donde descubrimos que no importa la cantidad de músicos, sino la cantidad de pedales. Los estuches de efectos de Greg Edwards y Eugene Goreshter eran impresionantes, los sonidos que salían de cada amplificador dejaron atónitos (y sordos) a los asistentes a este concierto. La pulcritud y precisión al momento de interpretar sus canciones, hace de Autolux uno de los mejores pupilos de la escuela de My Bloody Valentine, ya que se dedican a hacer mucho ruido pero de una forma tan limpia que podemos percibir todos sus elementos.

Fuck Buttons.

Fuck Buttons.

4. Fuck Buttons

Este dúo no escogió el mundo del rock y las alineaciones tradicionales, Fuck Buttons se inclinó hacia la música electrónica pero con tintes oscuros y dementes. Su intención no es ponernos a bailar sino reventarnos los oídos. Dentro de los elementos que conforman su música, podemos escuchar una fuerte carga de la escuela Shields. La guitarra es la base y soporte de piezas como “Ok, Let’s Talk About Magic” y “Sweet Love for Planet Earth”.

The Horrors.

The Horrors.

5. The Horrors

Aunque al principio de su carrera, la banda tenía un aspecto y un sonido mucho mas influenciado por el post-punk y la música garage de los ochenta, fue hasta su segundo álbum que dejaron ver sus brochazos de distorsión de la mano de Joshua Third. La manera en que las guitarras envuelven al escucha mientras los demás instrumentos guían las canciones, nos recuerda a los años dorados de Shields y compañía.

Jesu.

Jesu.

6. Jesu

Para algunos es post-metal, para otros post-rock muy pesado, lo cierto es que Jesu rinde un homenaje clarísimo a esa fantástica Jazzmaster marca Fender, el arma favorita de Kevin Shields. El álbum homónimo de este grupo dejó clarísimo que venían a hacer música fuerte y ruidosa, acompañada por una voz muy poco melódica pero que le da el toque que los acercó con otras escenas como la metalera.

Le Volume Coubre.

Le Volume Courbe.

7. Le Volume Courbe

De primera instancia, la francesa Charlotte Marionneau no tiene ningún vínculo sonoro con Kevin Shields, sin embargo, éste último tocó en su único álbum grabado hasta la fecha, I Killed My Friends. Además de Shields, Colm (baterista de MBV) y Hope Sandoval también aportaron su talento en este disco. Ha sido tal el gusto de los miembros de MBV por este proyecto, que en 2008 la invitaron a que abriera su gira del regreso, y este 2013 lo hicieron de nuevo.

Los Mundos.

Los Mundos.

8. Los Mundos

Uno de los elementos que más nos enamoró de Los Mundos fue su gusto por la distorsión y las capas de sonido. Desde la primera vez que los escuchamos, el fantasma de Shields se encontraba presente no sólo en la instrumentación, sino en la manera de cantar de Luis y el Chivo. En vivo, esa potencia que sale de los amplificadores se magnifica y hace obligatorio el uso de tapones en los oídos. El dúo se ha rodeado de personajes amantes de la música ruidosa como Efrén Barón (División Minúscula) y Maurizio Terracina (The Volture).

The Radio Dept.

The Radio Dept.

9. The Radio Dept.

Los suecos son menos agresivos que MBV, sin embargo, las atmósferas que abrazan la melosa voz de Johan Duncanson son un mar de ruido apoyado en guitarras y sintetizadores. Reinterpretando las enseñanzas del shoegaze, The Radio Dept. conservó la línea fría del género pero le agregó toques upbeat con secuencias y teclados que incluso funcionan en la pista de baile.

The Warlocks.

The Warlocks.

10. The Warlocks

Este grupo de Los Ángeles es oscuro a más no poder, su imagen es densa al igual que su música y el nombre de sus discos/canciones. Su álbum Heavy Deavy Skull Lover es la mejor manera de conocer el universo psicodélico de este grupo formado por una gran cantidad de personas. Su mezcla de blues, rock, shoegaze, post-rock y hasta folk, los ha posicionado como uno de los grupos ruidosos más importantes. Las líneas de guitarra son sombrías, por momentos delicadas y por otros estridentes, pero siempre empapadas de tremolo y reverb.