Llegué al venue con una mezcla de altas expectativas y escepticismo. Parecía que, en comparación a años anteriores, el All My Friends había mejorado su organización e imagen.

Fue impresionante ver todos los puestos de comida, restaurantes locales y chefs emergentes de la ciudad que se unieron al festival presentando todo tipo de platillos creados con ingredientes de la región. La música empezó un poco después de las 2 pm. Las primeras bandas en tomar el escenario, Glasmus y Ocean Noise, dieron un inicio fuerte al festival. Ambas acababan de ser anunciadas una semana antes. Después, Hexorcismos, proyecto alterno de Moises Horta (Los Macuanos, DJ Nombre Apellido), presentó un set de beats con tintes de dub, acompañados de samples fantasmagóricos y gritos de protesta que él mismo grabó durante las marchas del primero de diciembre en el Distrito Federal.

El slogan del festival, #minuevoamordeverano, se vio representado por las bandas Clubz, Las Robertas (Costa Rica) y Bleached (E.U.A), estas últimas con sus influencias de garage, surf rock la década de los 80 y hasta shoegaze. Había gente disfrutando de la música mientras nadaban en el mar, jugaban frisbee o simplemente se sentaban a escuchar. Las Robertas y Bleached fueron dos de los actos más exitosos del festival ya que se había creado un gran hype anticipando su participación ya que normalmente, Baja California no recibe ese tipo de bandas. Ambas generaron un momento muy grrrl power con el público.

En el escenario del jardín Late Nite Howl nos deleitó con su música folk con claras influencias de Daniel Johnston y The Microphones. Pablo Dodero, que ya lleva tiempo sonando en la escena local (y nacional) ha logrado mucho con Late Nite Howl, se presentó en algunos showcases organizados por Coachella y próximamente tocará en Viva Pomona, en la ciudad californiana del mismo nombre.

Uno de mis momentos favoritos del festival también fue uno de los más confusos para la mayoría del público, me refiero a cuando Ghost Magnet Roach Motel presentó su proyecto experimental/performance/banda lidereado por el artista tijuanense Daniel Ruanova. Acompañaron su set de NOISE con una intervención artística sobre el escenario y crearon un momento experimental muy diferente al resto del festival.

Ghost Magnet Roach Motel.

Ya más noche, Lumerians tomó el escenario de la playa para obscurecer un poco el ambiente con su psicodélia y kraut rock, mientras que en el escenario del jardín se preparaba Point Loma con sus millones de gadgets y sintetizadores. Después tocó Warm Places, también conocido por su proyecto Sixties Guns, llegó con tan sólo una laptop y un controlador NPC, para presentar un set lleno de energía y un performance increíble, convirtiéndose en uno de los actos favoritos del festival, ya que logró conectarse con el público como nadie más. Sin lugar a duda es un proyecto que vale la pena seguir ya que está próximo a sacar un LP.

Pasadas las 10 pm iniciaron los actos principales en el escenario de la playa. Gonjasufi, uno de los actos más esperados, dio un performance explosivo y experimental, con tintes de hip-hop y sonidos de sintetizadores crujientes y acelerados.

De repente, se reunió más gente de la que jamás se han visto en la historia del AMF; todos frente al escenario de la playa esperando a Fuete Billete. Al llegar, el baile y “perreo” comenzó gracias a sus ritmos hip-hop con coqueteos reggeatoneros. Complementó su set con un pequeño espectáculo de pirotecnia, un toque muy propio de Rosarito y sus famosos puestos clandestinos de cuetes.

Mientras esperábamos a Santos, quién era el encargado de cerrar el festival, vimos a L.A. Drones con un set que nos llevó de vuelta al 2007, una mezcla de artpunk “electroso” y un performance muy intenso con contenido sexual y masoquista.

Santos tomó el escenario para invitar a todos a bailar, literalmente: “Quiero ver a todos los que se están yendo que regresen y se pongan a bailar. Los de atrás, no los veo bailar”. Un set muy divertido que incluso incluyó batallas de twerk. Santos, que venía de un tour por todo México, se coronó en el All My Friends.

#AMFV superó las expectativas y asistencia de años anteriores; aprendieron de sus errores y los mejoraron, presentando una organización impecable, una degustación culinaria increíble, y una conexión con el público que no se había dado antes. Esto los deja con la responsabilidad de superarse nuevamente en 2015, ya que nos dejaron a todos con las ganas de más y mejores actos para el año que viene.