No todos los proyectos en Hollywood terminan con sus directores orgullosos de haberse sentado en la silla. Tomen el caso de George Lucas, por ejemplo, quien en su momento, decidió eliminar su nombre de los créditos de Body Heat (1981), un thriller erótico dirigido por Lawrence Kasdan. La razón: la película se alejaba por completo de la imagen familiar que Lucas había construido con Star Wars (traducción: lo obligaron a retirarse).
Tal y como farout reporta, a principios de los ’80, Lawrence Kasdan era un guionista en ascenso tras haber trabajado en El Imperio Contraataca (1980). Gracias a su talento, Lucas y Steven Spielberg lo eligieron para escribir En busca del arca perdida (1981). Pero mientras, trabajaba en estos grandes éxitos, Kasdan tenía otro proyecto en mente: su ópera prima como director, Body Heat.
Este thriller, protagonizado por Kathleen Turner y William Hurt, es una historia cargada de sensualidad, traición y crimen, algo que obviamente George siempre quiso hacer pero, venderle su alma al diablo le impedía.
La película fue aclamada por la crítica, pero su tono erótico distaba mucho del tipo de cine que Lucas producía. Aunque en un inicio apoyó el proyecto como productor ejecutivo, finalmente decidió desvincularse y pidió que su nombre fuera eliminado de los créditos, ya que aparte del cine, la verdadera máquina de dinero estaba en los juguetes y figuras de acción de Star Wars que vendía, por lo que una persona que estaba 100% conectada a venta de productos para niños, no podía verse inmiscuida en esto.
La decisión de George Lucas de alejarse de Body Heat refleja cómo los creadores pueden ser selectivos con los proyectos que respaldan públicamente. Aunque su nombre no figura en los créditos, su influencia en la carrera de Lawrence Kasdan fue clave, demostrando que incluso en las historias que no cuentan con su sello oficial, su impacto en la industria sigue siendo innegable.