Adidas ha decidido qué hacer con sus $1,300 millones de dólares en tenis Yeezy abandonados: Vender una parte y donar lo recaudado a organizaciones benéficas.

El CEO de Adidas, Bjørn Gulden, anunció el plan en la reunión anual de accionistas de la compañía, según The Associated Press.

Dijo que la compañía había hablado con varias organizaciones y grupos perjudicados por los comentarios antisemitas y polémicos de West el año pasado, y añadió que Adidas “donará dinero a las organizaciones que los ayuden y que se vieron perjudicadas por lo que dijo Ye.”

Adidas puso fin a su asociación con Kanye West en octubre del 2022 en respuesta al comportamiento errático del rapero y sus comentarios, que incluían temas de conversación antisemitas y afirmaciones desacreditadas sobre el asesinato de George Floyd.

Desde entonces, la compañía ha estado reflexionando sobre qué hacer con todas sus acciones de Yeezy, sin que ninguna de las opciones sea perfecta. Por ejemplo, la empresa no quería eliminar la marca Yeezy y luego vender el inventario porque sería deshonesto; y regalar los pares probablemente daría lugar a una oleada de reventas en los mercados secundarios.

Una opción era destruir todas las existencias, aunque como dijo Gulden en la junta de accionistas, “Quemar esas zapatillas no puede ser la solución”.

La disolución de la asociación Yeezy ha sido financieramente brutal tanto para Adidas como para West. Adidas ha reportado cientos de millones en ventas perdidas desde que terminó la asociación, incluyendo $655 millones de dólares sólo en los últimos tres meses de 2022 y $441 millones de dólares a principios de 2023.

En cuanto a West, a quien recientemente se ha visto vinculado con figuras de extrema derecha para otra candidatura presidencial; tras el fin de la relación se estimó que podría costarle unos $1,500 millones de dólares de patrimonio neto, lo que probablemente pondría fin a su apreciado estatus de “multimillonario”.