El mashup que nunca hubo, la colaboración que nunca fue, es probablemente lo mejor que el internet sí pudo imaginar y que escucharás el día de hoy.

Originario de Toronto, Ontario, el productor canadiense que corre con el nombre de Coins, decidió crear un EP completo basado en la idea de cómo un disco entre Daft Punk y los Beastie Boys hubiera sonado si estuviéramos en 1997, y ambos proyectos se hubieran conocido en el estudio.

Si bien, hay hasta cierto punto un aire a dubstep que no podemos negar, el acomodo de ambas bases melódicas logra infusionarse de manera bastante interesante, al punto que esa sensación de remix forzado se va perdiendo apenas llegamos a la mitad de la primera canción.

Una mashup entre Hello Nasty?, Homework y Discovery. Algo sencillamente perfecto que va más allá de los mashups mafufos de Youtube de los que solemos escribir donde algún incel hace que la Rosalía salga en un sampleo de SOAD.

Chequen por acá esta obra maestra:

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