Siete Catorce

La primera vez que escuchamos mencionar el nombre de Siete Catorce fue en una entrevista con María y José, quien nos hablaba de actos electrónicos que le llamaban la atención. Después de eso vimos por primera vez en la Ciudad de México al “Siete” en ESTADO, un evento organizado por NAAFI en el Centro de Cultura Digital, esa era la primera vez que él visitaba la capital también.

Aquella vez en la Estela de Luz, la música que hacía Siete Catorce nos voló la cabeza por su mezcla de sonidos tradicionales mexicanos que iban más allá de la cumbia o el tribal junto a otros que bien podrían haber salido de Bristol. “Suena a Four Tet” se escuchaba entre el público. Es muy difícil explicar en qué radica la genialidad del oriundo de Mexicali, ya que el Siete Catorce lleva su personalidad mucho más allá, impregna con su sangre cada uno de los beats que salen de su controlador y su cabeza.

Escuchar a Siete Catorce es transportarse en un viaje a un México desconocido o conocido por muy pocos, un mundo subterráneo, oscuro y peligroso, pero a la vez divertido, emocionante e intrépido. Lejos está el de Mexicali, de sonar como sus contemporáneos que únicamente agregan un beat complaciente a un sampleo de güiro, lo de Siete Catorce se acerca más a la composición del score de un viaje sensorial, en el cual hay fiesta (mucha), pero también hay encuentros introspectivos y densos.

¿Qué hace a un productor de música electrónica diferenciarse del resto? Lo mismo que a cualquier banda o acto musical: tener una historia que contar y saber cómo hacerlo, con qué herramientas y de qué forma transmitir el mensaje. Siete Catorce (o Den5hion o el nombre que quieran ponerle al tipo de los mil proyectos) cumple todas y cada una de estas características.

Escuchen a Siete Catorce y otras propuestas independientes en el canal de Fill Indie Blanks de Sony Music Unlimited.