La reciente aparición de Elon Musk como comediante en el popular programa de variedades ‘Saturday Night Live’ generó muchas bromas y reacciones en redes sociales. Pero uno de los mayores puntos de conversación de la actuación, fue que el CEO de SpaceX admitió que era la primera persona con Asperger en ser anfitrión de SNL. El sábado (8 de mayo), el consejero delegado de Tesla, fundador de SpaceX y uno de los hombres más ricos del mundo, de 49 años; abrió su monólogo burlándose de su monótono estilo al hablar, diciendo que nadie puede saber cuándo está bromeando.

“Es genial ser el anfitrión de ‘Saturday Night Live’, y lo digo de verdad”, dijo Musk de pie en el escenario con un traje negro y una camiseta negra. “A veces, después de decir algo, tengo que decir que lo digo en serio”.

Añadió, a modo de explicación, que era la primera persona con síndrome de Asperger que presentaba el programa. “O al menos la primera persona que lo admite”.

La revelación provocó varias reacciones en redes sociales. Muchos le felicitaron por su revelación y le aclamaron por aumentar la representación de las personas que viven con Asperger, o trastorno del espectro autista (TEA), como se denomina ahora.

Pero mientras que muchos alabaron a la decisión de Musk de hablar abiertamente sobre su condición en el programa; otros señalaron que su anuncio, aunque encomiable, era ligeramente inexacto. Los antiguos fans de SNL evidenciaron que Musk no era la primera persona con TEA que aparecía en el show.

Muchos recordaron que el actor canadiense y veterano de SNL, Dan Ackroyd, era un habitual de la emisión mucho antes de que Musk apareciera en el mapa. El actor de ‘Los Cazafantasmas’ hizo público que le habían diagnosticado TEA en 2013. Ackroyd ha aparecido varias veces en SNL antes que Musk.

Entonces, usuarios en redes sociales enfurecieron contra Musk por ningunear la propia existencia de Ackroyd.

Los internautas también criticaron a Musk por utilizar el anticuado término “Asperger” para referirse al TEA (Trastorno del Espectro Autista).

El uso del término para designar el TEA se ha ido eliminando con los años debido a su legado nazi. El trastorno de Asperger debe su nombre al científico austriaco nazi Hans Asperger; quien fue el primero en investigar e identificar la neurología atípica, especialmente entre los niños.