Hay veces en las que el lugar en donde un músico escribe un disco es importante e influyente, en otras ocasiones no. En el caso de Jack Steadman, el líder y vocalista de Bombay Bicycle Club, sus visitas a India, Japón y Turquía construyeron completamente el sonido de su cuarto disco de estudio. ¿Qué tanto? Mucho. La verdadera reinvención de la banda londinense está basada en ritmos del mundo que se mezclan con el sonido que les conocimos hace cinco años.

Al ser su cuarto disco, el reto fue aún más grande. Lograr desprenderse del mundo del indie rock sin caer en pretensiones o experimentos forzados, es lo que verdaderamente hace de So Long, See You Tomorrow un trabajo fresco y potente. Desde el momento en el que suena “Overdone”, se siente un ambiente espiritual y etéreo que el cuarteto no había sacado tanto a flote en sus anteriores entregas.

El hecho de que Steadman haya producido el disco con la única ayuda de Mark Rankin, hizo que sus influencias cruzaran caminos que van desde las percusiones bailables, hasta bases de hip hop, distintos rangos de voz (incluidas las de Lucy Rose y Rae Morris) y guitarras que contemplan los sonidos originales de la banda. Canciones como “Home By Home”, además tener como base algunos beats de hip hop, recrea y trae al presente el R&B.

Una de las mejores canciones del disco es “Eyes Off You”, una balada a piano crudo que viste los falsetes de Steadman. Es discreta pero a la vez intensa, una melodía que crece gradualmente hasta retomar las percusiones y en breves momentos traer a nuestra cabeza a bandas como Animal Collective. La gran mayoría del tiempo, So Long, See You Tomorrow suena ambicioso, emocionante e invita a escucharlo con detenimiento, sobre todo por la instrumentación.

“Feel” es el claro ejemplo de la cadencia que mantiene las bases del disco. Además de los frescos y bailables riffs de guitarra, está llena de samba, percusiones indias y un espíritu carnavalesco que convenientemente crece al final del disco. Estamos frente a un gran trabajo y una opción fresca para el primer trimestre del año, pero con esto también viene el verdadero reto de Bombay Bicycle Club: llevar sus nuevos y grandiosos sonidos a los escenarios.