Twitter hizo un estudio en el Reino Unido, para saber cómo afecta a nuestro cerebro tuitear. La compañía Neuro-Insight, responsables del estudio, descubrió que los usuarios frecuentes de Twitter se relacionaban más emotivamente con el contenido de esta red social que con el resto de sus interacciones en la web.

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Además, y es aquí donde las cosas se ponen interesantes para la compañía, y un poco desconcertantes para nosotros, se reveló que al ver el  timeline nuestro cerebro almacena grandes cantidades de información con gran eficacia (en parte por el formato de 140 caracteres que obliga a que cada mensaje sea directo y efectivo), y todos estos datos acumulados en nuestro cerebro, luego puede afectar nuestra toma de desiciones (sin que nos demos cuenta).

Lo anterior es una muy valiosa de información para los anunciantes, quienes podrían insertar datos o imágenes que tal vez después nos influencien a comprar sus productos.

¿Qué te parece esto? ¿Crees que Twitter, como Facebook, comienza a experimentar con nuestras mentes?

Vía: thedailydot.com