Finalmente, el Sol decidió aparecer en el último día del Vive Latino 2013. Desde las 12 del día, cientos de personas ya entraban al Foro Sol vistiendo ropa ligera y portando lentes oscuros. Aún con dos días de intensa actividad detrás, el cansancio era totalmente desconocido, pues el entusiasmo por lo que aún estaba por venir estaba en los cielos. El tercer día del festival prometía una ráfaga de favoritos como Celso Piña, Panteón Rococó,  Silverun Pickups, Natalia Lafourcade, Bomba Estéreo y, por supuesto, Los Fabulosos Cádillacs.

El día inició con las presentaciones de Nabuzenco -los primeros en visitarnos en nuestro espacio en backstage para una entrevisa- en la carpa Intolerante, los norteamericanos Red Oblivion en la carpa Danup y Pato Machete en el escenario principal, quien ofreció uno de los conciertos más divertidos del día, además de sorpresivos ya que contó con grandes invitados como Priscila y Marcela de Quiero Club, Celso Piña, Toy Selectah y Fermín IV con quien interpretó el clásico de Control Machete conocido como “Sí Señor”. La reunión del trío regio no ocurrió íntegramente ya que Toy bajó del escenario una vez que Fermín subió. Aún así, resultó emocionante para los miles de asistentes que ya ocupaban su lugar en la plancha del Foro Sol.

El Sol continuó cobijándonos durante un par de horas más obligando a miles a comprar cualquier artículo refrescante, desde un cerveza o un vaso de agua fria, hasta una paleta de hielo o raspado. Además, con el calor las distancias fueron más largas y agotadoras. Muchos invertían su tiempo en la búsqueda de una sombra, la cual usaban para relajarse y disfrutar del clima, al mismo tiempo que veían pasar miles de personas frente a ellos.

Avanzó el tiempo y los escenarios ya recibían a bandas como Renoh, poblanos ganadores del Rockampeonato que brillaron con su post rock alegre en la carpa Danup, Split Heaven en el escenario Unión, Los Aguas Aguas, todos vestidos de pants deportivos color verde, en la carpa Intolerante, y Bomba Estéreo en el escenario principal con una energía extraordinaria que tuvo al público brincando durante más de media hora. Los colombianos ofrecieron un show colorido y alegre que unió a todo el Foro Sol en una misma fiesta.

Un kilómetro lejos del escenario principal, también se realizaba una de las mejores presentaciones del día: Los Viejos. Con sólo dos integrantes, la banda originaria del DF portó sus tradicionales máscaras de “viejos” y entregaron su rock agresivo que combina géneros como thrash metal, punk hardcore y grindcore. Estuvieron acompañados de una sexy enfermera vestida blanco, quien subió al escenario para bailar en un par de ocasiones. En este mismo escenario, la carpa Danup, siguieron Los Cuchillos para provocar lo mismo que sus antecesores: explosiones constantes en el público que sólo quería descargar toneladas de energía.

Lamentablemente, el Sol decidió no salir más y las nubes se posaron sobre el Foro Sol a partir de las cuatro de la tarde, pero nadie bajó los ánimos. Sólo fue hora de abrigarnos y lucir nuestras chamarras.

Como los dos días anteriores, el Vive Latino estuvo lleno de ofertas gastronómicas, culturales y recreativas. Este día destacó el performance de danza y percusiones africanas que sucedió en el Faro de Oriente, el cual se ubicó en la recta principal del autódromo, justo frente a los reconocibles pits. Al igual que la carpa Cabo San Roque, el Faro de Oriente rebició a miles de personas durante todo el día del festival. Era una parada obligatoria para quienes buscaban descubrir nuevas opciones.

Celso Piña es indiscutible garantía de fiesta. El músico regio convocó al público a bailar cumbia en parejas, emulando un “bailongo” masivo a las cinco de la tarde, cuando el Sol ya no estaba a la vista y el aire comenzaba a pegar. 50 minutos de exquisita música tropical y cumbia no fueron suficientes para muchos pero el día tenía que avanzar, ya que estaba por llegar el combo más notorio del día: Panteón Rococó – Ska-P – Los Fabulosos Cadillacs.

Pero antes de esto, el escenario Unión y las carpas Intolerante y Danup veían desfilar grandes actuaciones como las de Corizonas, banda resultado de la fusión Los Coronas – Arizona Baby, ambos desde España, Chicha Libre, cumbia electrónica desde Nueva York, Lazcano Malo, Naftalina, Max Capote e Inclán Funk.

De regreso en el Foro Sol, staff de Panteón Rococó comenzó a repartir paliacates de colores amarillo y negro con el logotipo de la banda. La plancha se unificó en colores y ayudó a crear muchas expectativas de su presentación. Y no es que hubiera dudas de ésta, pero siempre se sabe que “el panteón”, como le llaman miles, provoca en la gente tanto desenfreno como pocas bandas. Cuando el numeroso grupo apareció sobre el escenario, cervezas y personas comenzaron a volar por los aires. A lo largo de una hora y con sus frenéticos clásicos, la banda conquistó al Vive Latino y demostró ser una de las bandas que mejor sonaron en el último día del festival. La primera parte del combo terminaba y abría paso para los españoles Ska-P.

Al mismo tiempo, Monsieur Periné subió al escenario de la carpa Danup para sorprender con su swing colombiano y embolsarse unos cuantos miles de curiosos que pasaban por ahí. Sobre el escenario Unión, el italiano Jovanotti trataba de encontrar su lugar en el Vive Latino 2013 ante un público fiel a sus éxitos noventeros.

Ya caída la noche, subió Ska-P al escenario principal y la banda fue recibida por un público que le tiene mucho cariño desde hace más de una década. Por supuesto, el frenesí continuó y los españoles ofrecieron un alegórico concierto lleno del ska–punk que los caracteriza. Los recién llegados al Foro Sol descubrían que, para este momento, era imposible filtrarse entre la gente para encontrar un lugar más cerca del escenario, pues se acercaba la hora de “los Cadillacs”.

El Foro Sol ya registraba un lleno total a las ocho de la noche y miles caminaban hacia el escenario Unión para presenciar el show de Natalia Lafourcade muy cautivador y sensible. Lejos de ahí, Gepe subía al escenario de la carpa Danup para deleitarnos con una ola de excelentes canciones desprendidas de su último álbum GP y algunos clásicos más. Acompañado de bailarinas, y todos en un atuendo folclórico y colorido, Gepe encendió por completo a los congregados en la carpa quienes fielmente se quedaron con él hasta que sonó el último acorde. Sobre el mismo escenario le siguieron los argentinos Él Mató a un Policía Motorizado, los capitalinos Le Baron y, finalmente, Balkanbeats.

El escenario Unión, pasadas las nueve y media de la noche, finalmente recibió a los norteamericanos Silversun Pickups quienes hipnotizaron por completo con su magnífico shoegaze que se escucha completamente fresco y bien ejecutado en vivo. La banda compartió canciones de sus tres discos por igual y culminó su participación en el Vive Latino 2013 con su aclamada canción “Lazy Eye”.

Del otro lado de la pista, Los Fabulosos Cadillacs ya tocaban frente a un Foro Sol completamente lleno, donde no se podía siquiera caminar cómodamente, pero para poder disfrutar, sólo quedaba la opción de bailar y cantar al unísono canciones como “Radio Kriminal”, “Mi Novia se Cayó Sobre un Pozo Ciego”, “Calaveras y Diablitos”, “Manuel Santillán, El León” y un par de covers a The Kennedys con “Let’s Lynch the Landlord” y a The Beatles con “Strawberry Fields Forever”.

Vicentico y compañía ofrecieron un concierto gigantesco y muy emotivo. El público se entregó por completo con cada canción y la banda sonó impecable, cada instrumento en su lugar y todos con una ejecución perfecta. Los Cadillacs hacen justicia a su nombre como realmente fabulosos, y con cada año que pasa, la banda se hace más y más fuerte, además de consagrarse como uno de los clásicos supremos del Vive Latino, totalmente obligados.

El Vive Latino 2013 fue divertido, enérgico, emocionante, lleno de pluralidad y diversidad, palabra que podría describirlo por completo, sobre todo en esta edición. Desde el público hasta las bandas, la cantidad de opciones concentró a distintos gustos en una sola celebración a la música y a la hermandad que ésta provoca. Fue una lástima que el primer día, estipulado para el jueves 14 de marzo, no sucediera, pero encima de extrañarlo, fue honrado con tres días de gran ánimo y presentaciones memorables. Desde organizadores, roadies, bandas, staff y público, tres días fueron suficientes para generar miles de historias fascinantes, historias inmortales que nacieron en el Vive Latino y que serán contadas infinidad de veces. Sólo queda decir, ¡nos vemos en 2014!