Netflix debe estar bastante nervioso en este momento.
Hace unos cuantos días se confirmaba que el gobierno de los EE.UU. había dado luz verde a la petición de Disney para fusionarse con Fox después de que vencieran una demanda antimonopolio condicionada por la venta de los 22 canales regionales deportivos de Fox. Estos últimos, aceptaron la oferta de Mickey Mouse (que se valuó en $71.3 millones de dólares) después de que Comcast le propusiera la nada despreciable cantidad de $65 millones de dólares.
¿Cuál será el resultado de esta fusión?
Disney ahora tendrá los derechos de transmisión de éxitos de la pantalla chica como Los Simpsons, Futurama, canales completos de paga como FX o National Geographic, franquicias cinematográficas como ‘Avatar’, ‘X-Men’, y personajes como ‘Deadpool’ que en un futuro no muy lejano podrían incluirse en las películas de ‘Avengers’.
¿Y qué tiene que ver Netflix en todo esto?
Disney anunció recientemente que durante 2019 lanzará su propio servicio de streaming (rompiendo toda relación con Netflix) y se llevará consigo todas las películas de la productora, así como ‘Star Wars’, pero ahora que Mickey posee todos los derechos de Fox, las posibilidades de entretenimiento dentro de la nueva plataforma de streaming se hacen verdaderamente infinitas.
El objetivo de Disney durante primer año de operaciones es generar de 4 a 5 películas originales y cinco series que contaran con un presupuesto de cien millones de dólares por cada diez capítulos.
¿Y qué pasará con las series de Marvel que viven dentro de Netflix?
Según lo informado por Deadline, todas las producciones relacionadas con Marvel se quedarán en donde están, por lo que Netflix seguirá manteniendo su catálogo de superhéroes (aunque esto no quiere decir que Disney no pueda generar nuevos contenidos de Marvel para su servicio).
