Solo los fans de ‘Game Of Thrones’ saben lo que es en verdad el dolor. Sabes que no puedes encariñarte con nadie, que hasta el personaje principal puede morir, y de la peor manera posible. Frases tan simples como “hold the door” o “for the watch” nos deprimen inmediatamente, y escenas “fuertes” de otras series ya no nos impresionan para nada. Y si hiciéramos un conteo de todas las veces en que ‘Game Of Thrones’ nos ha tenido al borde de un infarto, no terminaríamos, pero estas son algunas de las veces que nunca podremos borrar de nuestra memoria.
La muerte de Ned Stark. “Meh, es el principal, obvio no lo van a matar”, y ese fue el momento en que nos dimos cuenta que no podías encariñarnos con ningún personaje de ‘Game Of Thrones’.
La corona de Viserys Targaryen. Si aún odiabas a Khal Drogo, te hizo cambiar de opinión y lo amaste por siempre. Hasta el momento, todos aún somos #TeamKhalDrogo.
La boda roja. Después de esto, no quisimos ir a ninguna boda por un buen rato, y menos si tocan Rains Of Castamere. Además, sirvió para que realmente te quedara claro que no te debías encariñar con nadie (menos si era Stark).
La muerte de Joffrey. Ha sido uno de los momentos que más hemos disfrutado de la serie, de seguro gritaste o brincaste de tu asiento. Por fin, tuvimos un poco de alivio y justicia.
La muerte de Red Viper. Una de las muertes más gráficas de la serie, y que además fue el motivo por el que revivieron a La Montaña en un zombie extraño.
La caminata de expiación de Cersei. Creo que es la única vez que hemos sentido realmente lástima por Cersei, golpeada, y cubierta en basura… o ¿no?
Cuando Stannis quema viva a su hija. Y luego se pregunta porqué no le regalaban una taza de “mejor padre del mundo”. Definitivamente una de las cosas más viles que se han visto en la serie.
La muerte de Jon Snow. No puedes decir que no ha sido una de las veces que más gritaste y te frustraste con el final de una temporada, y sí, sigue vivo, pero por un momento pensamos que se nos iba. FOR THE WATCH!
La muerte de Hodor. Nuestro corazón solo puede aguantar hasta cierto punto, pero esta definitivamente ha sido la muerte que más nos ha destruido el corazón.
Pero, bueno, al menos algo bueno salió de la caminata de expiación de Cersei. SHAME! SHAME! SHAME!