Si aún no has terminado de ver toda la temporada, te sugerimos que tengas un poco más de paciencia y leas esto después (porque vas a querer hacerlo). Pero hay demasiados spoilers en este artículo, así que pasa bajo tu propio riesgo.

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Esta nueva serie de Netflix anda en boca de todos, y todos tienen su opinión sobre el suicidio de Hannah Baker. Si fue algo exagerado, o si la serie realmente retrata el sufrimiento de un adolescente y el peligro de las redes sociales. Pero lo que está claro es que la serie se llama ’13 Reasons Why’, con 13 episodios, en los que pasamos por cada uno de los motivos que tuvo Hannah, ¿no? Pues, al parecer Netflix está tentado en lanzar una segunda temporada.

Si ya se acabaron las 13 razones, entonces, ¿de qué va a tratar? Como ya sabemos, el final queda bastante abierto, y con muchos enigmas con respecto al caso de Hannah, las violaciones de Bryce, el tiro en la cabeza de Alex, y el uso que le darán a las cintas en el caso. Y quizá, es comprensible que debido a que la serie fue un hit absoluto para la compañía de streaming, y que hay más historia para indagar en una segunda temporada, suena como una de las peores ideas de la historia. Y aquí les decimos porqué:

El final abierto. Sabemos que todos estamos sedientos de justicia por todo lo que sucede en la serie, pero, todos sabemos que así no funciona la vida real. Esto no es un cómic de superhéroes donde el malo va a la cárcel y todos son felices. El final abierto le da un sentido más realista, porque sabemos que la justicia (aquí y en China) no funciona tan fácil.

Ya se acabaron las razones. De nuevo, la serie se llama ’13 Reasons Why’ por un motivo, porque la novela escrita por Jay Asher así lo dice. Entonces, ¿de donde van a sacar más motivos?

El sufrimiento de Hannah. Sabemos que Hannah Baker dejó las notas por algún motivo, pero, ¿en verdad se necesita prologar el sufrimiento de una adolescente que cometió suicidio? Eso ya sería demasiado morbo. Sería solo la necedad de encontrar un cierre forzado a una historia que no fue hecha así.

El sufrimiento de Clay. Vimos durante toda la temporada cómo Clay Jensen fue atormentado por cada una de las cintas, y al final parece seguir adelante. Tener una segunda temporada sería la necesidad de ver la tortura que el caso le está provocando a Clay; y más teniendo en cuenta que su madre fue contratada para representar a la escuela en la demanda.

La vida no es como la vemos en la televisión, y quizá es por eso que para muchos esta serie resultó un tanto incómoda, porque a pesar de que el hilo de la historia suena como algo que no pasaría tan fácilmente, todo lo que le sucedió a Hannah es algo que sí podría suceder.

Quizá estamos pensando que una segunda temporada sería como una mala secuela de una película muy buena, pero solo queda esperar para ver si Netflix realmente decide hacerla, y solo así podremos juzgar si será algo bueno o no. Pero, desde un inicio, no parece una buena idea. O tú, ¿qué opinas? ¿Quieres que el caso de Hannah Baker tenga la justicia que merece?

Vía Mashable