Todos hemos oído hablar de la famosa darknet o deep web, uno de los lugares más oscuros de la red, donde se venden drogas, armas, identificaciones falsas y todo lo que quieras que no puedes encontrar en Amazon. Silk Road es, quizá, el sitio más grande para vender y conseguir este tipo de productos, un sitio que necesita de mucha tecnología para funcionar: servidores, más servidores y una plataforma lo más segura posible para no ser penetrada (por otros usuarios o por las autoridades).

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Ahora, tener un sitio como Silk Road implica llamar la atención e incluso ganarte uno que otro enemigo. Así le ocurrió a Dread Pirate Roberts (alias del fundador de Silk Road), quien tuvo que pagar a distintos hackers la suma de $450,000 dólares, básicamente por su silencio y para que no molestaran o delataran el proyecto. Algunos de estos hackers alegaban haber encontrado fallas (o bugs) en el código de Silk Road. Para no compartir estas vulnerabilidades, pidieron dinero. Mucho dinero.

Otros, hacían lo mismo, solo para no lanzar ataques DDoS que podrían tirar a este sitio. Esto fue revelado en un nuevo documento en medio del juicio que se realiza contra Silk Road, el cual hoy tiene lugar en la ciudad de Nueva York, el cual se ve muy complicado que sea ganado por su fundador.

Ya lo sabes, si tienes (o llegas a tener) un sitio en la deep web, necesitas dinero para mantener a raya a tus posibles enemigos.

Vía Vocativ.