Hace pocos días hablamos de qué tan adictos somos a Internet y a Facebook, puntualmente hablando. Se habló que, en promedio, pasamos alrededor de 45 minutos al día en esta red social. Es muchísimo tiempo, ¿verdad? Ahora suma el tiempo que pasas en Twitter, en WhatsApp, viendo mapas, videos y bueno, todo lo que te mandan tus amigos.
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Pensarás que hasta te falta tiempo para poder ver todo lo que ofrece Internet cada segundo. Básicamente por esto, no podemos dejar de ver contenido en casa, en la oficina o incluso cuando estamos en la calle. ¿Cuántas personas has visto en la banqueta que van caminando sin ver al frente, debido a que su mirada está en su teléfono celular?
Bueno, seguramente esto también te ha pasado a ti. Pues ahora, un nuevo estudio publicado por PLoS One sugiere que nuestra adicción al celular ya está modificando nuestra forma de caminar. Esta investigación, realizada por las universidades de Bath y Texas en 30 participantes, determinó que nuestra manera de caminar ahora posee un patrón enfocado a evitar que nos lastimemos.
Esto es lógico, si no estamos concentrados en lo que tenemos al frente, por instinto nuestro cuerpo se mueve con mayor cautela. Pero puntualmente hablando, estos son los verdaderos efectos de nuestra adicción al celular en la forma de caminar.
- La longitud de sus pasos es más corta que antes.
- La frecuencia con la que dan pasos es más reducida.
- La duración del tiempo de contacto entre cada pie y el suelo es mayor.
- La capacidad de superar obstáculos “altos” también es mayor.
¿Recuerdas la última vez que caminaste sobre una banqueta e ibas viendo el celular? Ponte a pensar y descubrirás que todo esto es muy cierto.
Vía BI.
