Nueve años son muchos. Para Calle 13 significan cinco discos, discursos siempre enfocados a defender los ideales de la humanidad y hacer notar las dificultades con las que se encuentran las sociedades, así como los grandes destellos de esperanza que cada uno de nosotros tenemos. Lo curioso de su regreso este 2014 es el existencialismo con el que enfrentan estos temas y la mezcla de sonidos que acompañan las rimas. Para ellos no todo es el espíritu contestatario y el cuestionamiento de los establecido, por lo menos no en este disco que lleva consigo un título que podría sonar a los contrario.

“Multi_Viral”, el primer sencillo que escuchamos de su nuevo trabajo, vive a la mitad del disco como un grito estruendoso de alguien que levanta el puño ante los medios comprados y la desinformación. ¿Suena común en Calle 13? Sí, pero particularmente en MultiViral, esta colaboración con Julian Assange, Kamilya Jubran y Tom Morello no es parte del sentimiento que desborda el disco. Aunque por un lado “Adentro” demuestra el enojo de Residente en su más alto nivel, cuestionando a los raperos violentos y a las rimas que aluden a la sangre y la matanza, el resto de las canciones de su largo tracklist analizan la vida, la fuerza y el aprendizaje humano.

“¿Tú eres bruto, cabrón? Rapeando sobre cómo volar sesos, en un país donde te matan por robarte un peso”

La identificación con las letras de Calle 13 en esta ocasión abarcan más generaciones, más temáticas y situaciones. Todo comienza con “El viaje”, una introducción con la voz del periodista y escritor uruguayo Eduardo Galeano, que sirve como escena inicial, como el principio de una historia de vida de crecimiento, aprendizaje y lucha, desde el momento en el que un humano deja el vientre de su madre. El existencialismo y la vida como tema principal comienza ahí y se desata con “Respirar el momento”, una canción que habla de nacer y enfrentarse al mundo, aclimatar el corazón, tomar impulso y pensar en que nacemos valientes.

Aunque MultiViral tiene canciones como “El aguante” donde se habla sobre cómo las sociedades viven y se enfrentan al desempleo, la represión y la guerra, el discurso optimista es el que domina y el que intenta contagiar. Calle 13 cuestiona el mal funcionamiento del mundo y recuerda momentos como Hiroshima y Nagasaki, pero no nos lo muestra como el fin de la humanidad, sino como un obstáculo que nos ha hecho más fuertes e inteligentes con el paso de los años.

“Por lo que fue y por lo que pudo ser, por lo que hay, por lo que puede faltar. Por lo que venga y por este instante , ¡a brindar por el aguante!”

El amor y el baile como conceptos de felicidad y esperanza es otra de las cosas que hacen de este nuevo disco de Calle 13 algo diferente. Canciones dulces y de enamoramiento como “Ojos color sol” con la colaboración de Silvio Rodríguez, así como “Cuando los pies besan el piso”, forman parte del discurso optimista y que empuja a soñar despierto, a sentir mariposas en el estómago y a bailar como método para acabar con la violencia. Suena romántico, pero más allá de historias de amor comunes, Residente y Visitante crean atmósferas alegres, sinceras y sobre todo empáticas con quienes buscan un momento de esperanza entre las adversidades.

“Hoy es el día en que nacemos de nuevo, tus neuronas moralistas yo las muevo. Con los pies golpeando firme y preciso, hasta que el cuerpo relate lo que nos cuenta el piso”

¿Qué es Calle 13? ¿A qué suena y por qué habla de lo que habla? Los nueve años que han pasado desde su disco debut no han sido suficientes para definirlo, por lo menos no para ellos. “Gato que avanza, perro que ladra” es la manera en que el dúo explica qué hace en este mundo. Con rítmicas más funky y una lírica más relajada, expresan su desinterés por lo que diga la crítica y por el contrario, hablan de la mezcla de ritmos que los identifica y el poder que tienen sus juegos de palabras. Entre pensamientos existencialistas como “Fuera de la atmósfera del cráneo” y “Me vieron cruzar”, esto se siente más como un pretexto para justificar la vida de Calle 13.

Al final, el espíritu que ambos músicos inyectaron en esta nueva entrega se desprende un poco de un discurso crudo. La postura es determinante, pero el camino no fue cuestionar al gobierno ni a la política mundial, sino alentar la fuerza interna y defender todo lo que se construye a lo largo de la vida. “Así de grande son las ideas” es un cierre que explora ese camino y que invita a defender las ideas y a no venderlas, sobre todo cuando son maravillosas.